Categorías
Prueba

Desmontando a un coach.

Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 51 segundos

Existen los monstercoachs! Aliados de los Monsters in the company.

Los falsos profetas.

Los monsterscoach están cada día en las redes, inundan de frases grandilocuentes  Instagram, YouTube y, sobre todo, TikTok. Invitan a emprendedores y a empresarios a desafiar los límites, a ir detrás de sus sueños. Esta especie de gurús que nos ilumina el camino abunda. Parados sobre un pedestal de voluntarismo, dan recetas trilladas pero, para sorpresa de Steve Jobs, que los ve desde el más allá, están llenos de likes y de seguidores. “Nunca te rindas”, dice el título de una foto de un café con leche, junto a un jugo de naranja, de un desayuno de campeones. Son las 7.45 y te cuentan que se despertaron a las 5, que meditaron, que salieron a correr, que tendieron la cama, que se lavaron los dientes con la mano que no usan de manera frecuente, que chequearon sus inversiones, que leyeron tres libros, que baldearon la vereda, que llevaron a las bendis al colegio, que se dieron una ducha fría y que ya están prestos para enfrentar una jornada llena de desafíos. Mientras el rebaño recién está apagando el despertador, ellos son felices y están llenos de energía.

Esta mirada no es generalizada. De ninguna manera apunta al ciento por ciento de los coaches. Yo estudié, me gradué y obtuve logros extraordinarios como coach. Esto no es en contra del coaching ni de ninguna de sus variantes, es contra los chantas. El coach ontológico pierde con los abogados en las semifinales de los profesionales más defenestrados. 

También hay psicólogos que se volvieron monsterscoach. Chantas de muy diversas profesiones.

El personaje que interpreta Ezequiel Campa en su canal de YouTube, Santiago Noestudiénada, chamán urbano y DJ, es la máxima expresión del coach chantún, del entrenador de vida, del capacitador energético de seres sintientes. Lo increíble es que cuando miro los videos de Santiago Noestudiénada, me parecen exagerados. Pero cuando miro los videos de los iluminados que vienen a traernos el bien, a través de cinco tips, para cambiar nuestra vida en un minuto, o cuando escucho lo que dicen o cómo lo dicen, me parece que Ezequiel Campa se queda corto.

Estamos hablando de negocios y estamos hablando de personas que venden servicios y de otras que los compran. Este tema, si lo desarrollamos, es un paper en sí mismo. 

Ahora, voy por otro lado. Gente adulta realizando comercio. Lo que me preocupa es la oferta del monstercoach, los profesionales de diversas disciplinas como, por ejemplo, los profesores de yoga, los personal trainers, los psicólogos, los life coaches, los counselors, los sanadores del alma y los electricistas, entre otros, todos dispuestos a iluminar nuestras vidas. Buenos y malos profesionales hay en todas partes. Acá el asunto son los ladris, y cada profesional serio podrá identificarlos mejor que una persona que no es del palo.

Tu empresa está en juego

Los peligros de esta armada de voluntaristas del cambio, militantes del aforismo, son alarmantes. El monstercoach pone tu negocio en riesgo o tu empresa en juego. El único misterio en el mundo de los negocios es el aprendizaje, basado en el compromiso, en el orden, en la disciplina, en la rigurosidad, en la creatividad, en la comunicación efectiva y en las mediciones; hay que hacer muchas mediciones.

¿Cuáles son los más peligrosos?

Esas cuentas del tipo mentalidad millonaria que publican la foto de una Ferrari con el epígrafe “Dale like si crees que serás el único millonario de tu familia” son riesgosas. Las manejan los monsterscoach y temo que le generan un daño cultural al mundo de los negocios. 

Tengamos en cuenta lo más básico: los negocios son para ganar dinero. Si no, no serían negocios. El reduccionismo es lo que me altera. Son bonsáis del intelecto, quieren todo chiquito. Después de los sea monkeys, son la mayor estafa que existe. Asegurarle a un iluso sin talento que puede ser millonario en cinco años a partir de un cambio de mentalidad es una crueldad. La realidad es que la mayoría fracasa en el mundo de los negocios, hasta la Coca-Cola Life fracasó. Nadie tiene nada garantizado.

Los negocios en cualquier escala pueden salir bien, mal o más o menos. No hay muchas más vueltas.

Estas pirañas suelen atacar cuando huelen dinero en el bolsillo, nunca regalan su conocimiento a barrios carenciados para que la mentalidad millonaria se expanda a todas las clases y crezcan los mercados, la competencia, y ganemos todos, no. La oferta está dirigida a personas que andan a la deriva y que tienen un dinerito ahorrado, que luego se diluye en los cursos y honorarios de estos seudoprofesionales, también en las inversiones sugeridas por estos baluartes de la nada.

El monstercoach usa su conocimiento para sentirse importante. Esta herramienta es fundamental. Por tal razón, su incorporación debería ser la dieta más saludable para nutrir la lucidez a la hora de hacer negocios.

Pero quienes vendemos servicios no podemos pararnos en el pedestal de nuestro conocimiento ni ubicarnos por encima del cliente o prospecto. Esos videos que empiezan diciendo: “¿A qué edad te diste cuenta de que…?” son de lo peor. Si Gandhi viviera y los viera, arrojaría su smartphone contra la pared.

El conocimiento es un puente, no un pedestal. Tampoco es un respaldo; es un camino de unión, tanto hacia quienes saben de lo que hablamos, como hacia quienes no tienen ni idea. Un puente de comunión, eso es el conocimiento. La petulancia no es tierra firme para compartirlo.

Quizás el gen de este metaverso de chantas digitales debe su origen a los pastores electrónicos de los 90.

5 formas de identificar a los monsterscoachs.

  1. Siempre te dan ánimo.
  2. Les encanta postear frases de sobres de azúcar.
  3. Son muy cool. Tienen vidas hermosas, siempre.
  4. Te dicen que para ser más efectivo debés pertenecer al club de las 5.
  5. Te recomiendan, como Susana Giménez, que no cuentes tus proyectos. 

El voluntarismo es una peligrosa corriente que basa su efectividad en la fuerza de voluntad. Son las aguas en donde navega con solvencia el monstercoach. Son los mares de la creencia: “Si puedes desearlo, puedes lograrlo”. “Piensa que el universo conspira cuando quieres lograr algo”. Pero, cuando llega la inspección de impositiva, el universo, ese día, da parte de enfermo.Dar ánimo es una característica fundamental de los monsterscoach, estas almas maestras de las que no somos dignos. “No te rindas, no bajes los brazos”, te dicen, como si no fuera inteligente abandonar un camino estratégico que no conduce a obtener resultados.

Los monsters pueden llegar a tu empresa como salvadores.

El gran desafío es agudizar la mirada, escuchar más tranquilos para poder diferenciar a los buenos de los malos, a los chantas de los decentes, porque las arenas movedizas que tenemos que atravesar son peligrosas.Estos personajes poseen carisma y usan las mismas palabras que un profesional honesto. Lucidez también es elegir a quién le otorgamos la autoridad, de quién tomamos herramientas y qué herramientas para incorporar a la gestión.